Julio
No viajamos para escaparnos de la vida, sino para que la vida no se nos escape. Ya que los viajes en los jóvenes son parte de la educación; en los mayores es parte de la experiencia. Siendo jóvenes es muy importante ya que aprendemos un montón de otras culturas, y es parte de nuestra experiencia.
Aunque me faltan muchísimos lugares por conocer, voy a contar algunas de mis experiencias viajando.
Uno de mis mejores viajes fue a la Riviera Maya (México), lo hice con mucha ilusión y muchas ganas. El vuelo de ida duró 10 horas, y sorprendentemente el de vuelta duró 9 horas, ya que el trayecto no es el mismo, ya que a la vuelta subía hasta Florida y luego hacía una curva descendiente hasta España.
Cuando llegamos a Cancún; una ciudad costera muy turística y maravillosa; nos dirigimos al hotel, nosotros nos hospedamos en el "Grand Sirenis Riviera Maya Resort & Spa", un resort que recomiendo muchísimo debido a sus espectáculos, sus bufets, sus habitaciones, piscinas...
Al llegar al hotel nos dirigimos a la habitación, dejamos las maletas, y nos fuimos a descubrir el hotel, como teníamos hambre, nos dirigimos al bufet. Era un bufet muy completo. En este hotel había un montón de bufets, y cada uno tenía una temática. Uno tenía comida mexicana, italiano, japonés, francés, brasileño... Cada noche íbamos a uno diferente, a probar distintas delicias.
Al día siguiente fuimos a Chichen Itzá, es uno de los principales sitios arqueológicos de la península de Yucatán, en México. Está ubicado en el municipio de Tinum, en el estado de Yucatán. Consistió en una ciudad o un centro ceremonial, que pasó por diversas épocas constructivas e influencias de los distintos pueblos que la ocuparon y que la impulsaron desde su fundación. A mí me encantó este monumento, considerado por una de las Maravillas del Mundo
En cuanto a la visita en sí a casi todos nos encantó. El guía era bastante bueno, y te hacen intentar entender la mentalidad de los mayas y su visión del Universo, a la vez que te van explicando el significado de la pirámide y demás restos de la ciudad.
Al día siguiente nos dirigimos a Xel-Há, un parque de atracciones acuáticas más famoso de la Riviera Maya, había un montón de vegetación, y un montón de especies marinas, buceabas alrededor de peces tropicales. Los antiguos Mayas bautizaron a este maravilloso sitio con el nombre de Xel-Há, que en lengua maya significa "Donde nace el agua".
El día siguiente lo dedicamos íntegramente al hotel. Un resort con un montón de actividades, piscinas, espectáculos... no se ve en un día, así que ese día nos quedamos aquí.
Al quinto día fuimos a Tulum y a Cobá, unas ruinas mayas muy impresionantes. Recorrimos sus restos conociendo su historia y narrando sus leyendas. Además, tuvimos una hora y media de tiempo libre para nadar por vuestra cuenta en las playas de Tulum.
Entramos en los templos del Dios Descendente y el de los Frescos para conocer de cerca los ritos mayas.Recorrimos las lagunas y cenotes de Cobá, una de las ciudades mayas más antiguas y lugar donde se encuentra la pirámide más alta de la península del Yucatán. Pudimos observar la inmensidad de la selva que la acoge.Descubrimos algunas de las profecías de los mayas visitando la estela maya de Cobá.
Al día siguiente fuimos a la Isla Mujeres, la verdad es que tiene un encanto especial. Las calles del centro son muy coloridas y llamativas, y tiene un aire más auténtico que cualquier sitio que hubiéramos visto. A la vuelta, visitamos el centro de Cancún. El barco con el que fuimos a la Isla era muy cómodo y bonito, nada estresante y no te mareas; claro, en el caribe es muy tranquilo; la Isla es bastante pequeña, pero preciosa.
Al séptimo día fuimos a "Cenote 2 ojos", que es una cueva muy famosa que vas nadando. Fue una pasada.
El último día nos dirigimos al aeropuerto, con pena por irnos, nos montamos en el avión, y 9 horas después, ya habíamos llegado a España.
Otro viaje que he hecho fue a Túnez, fui en navidad, y duró el vuelo 2 horas. Cuando llegamos nos hospedamos en el hotel. Al día siguiente fuimos a visitar la Gran Mezquita de Kairouan.Sus columnas recicladas de los romanos bizantinos llaman bastante la atención debido a su peculiaridad.
Al día siguiente nos dirigimos a las Dunas de Douz, un lugar donde podrás pasear a lomos de un dromedario por una zona de dunas, o si lo prefieres, ir en calesa de caballo o conducir un quad.
Fuimos por diferentes pueblos, como Tamezret, pueblo bereber o Matmata.
También fuimos a la isla de Djerba, donde estuve por las callejuelas de la principal ciudad de este enclave turístico, y pude ver zocos, mercadillos y varios bonitos rincones.
El hotel donde estuvimos se llama"Hotel Le Royal Hammamet de Bluebay", es un gran resort de cinco estrellas que ocupa 8 hectáreas de superficie junto a la citada playa y donde te llamará la atención su extenso y muy cuidada zona ajardinada. Tiene decoración de estilo árabe.
